Después de cuatro fechas Arsenal volvió a ganar. Cuatro fechas en donde podría haber cosechado más puntos, pero sólo se quedó con dos. Esta noche parecía que tampoco lo iba a lograr y por eso tuvo que sacrificarse para vencer al Ciclón.

En los primeros minutos dominaba el juego, había salido con el objetivo claro: quedarse con el triunfo en casa. San Lorenzo, de la mano de Romagnoli, mostraba algunos pasajes interesantes y con los minutos logró emparejar el desarrollo del juego. Igualmente jugaba lejos de Campestrini, por eso era el Arse quién estaba más cerca del gol. Legui tuvo la más clara, que definió desviado cuando quedó frente a Migliore. El ciclón, en cambio, facturo en la primera que tuvo: una demora en el retroceso de los defensores del Viaducto fue aprovechada para marcar el uno a cero.

Para la segunda parte Alfaro mando a Alustiza y Mosca, quienes terminaron participando en la remontada final. El celeste y rojo tuvo otra actitud, salió consciente de que tenía que dar vuelta el resultado sea como sea. San Lorenzo decidió cuidar el gol que había conseguido y apostó a tener alguna contra para liquidar el partido.

A los 17, un córner de Alustiza fue peinado en el primer palo por Choy para que Obolo definiera en el segundo palo. Merecido empate, pero el Arse aún no se conformaba. Siguió intentando, pero muchas veces por los caminos equivocados. Igualmente tuvo dos muy claras, ambas en los pies del Chavo Alustiza, una se la tapo el aquero y la otra dio en el poste. Parecía que se escapaba nuevamente, la embestida de Arsenal de los quince minutos finales no era suficiente.

Ya se cumplía el tiempo, sólo quedaba un tiro libre en tres cuartos de cancha y lo ejecutaba Alustiza. Remató al arco, pero un defensor la dejó boyando dentro del área para que Marcone habilitara a Mosca que con su primer gol en primer decretaría el triunfo local. Arsenal logró un agónico pero merecido triunfo, cortó la racha de sequia y ojalá pueda continuar esta senda en los tres partidos finales que restan.