Con la labor del equipo de Alfaro durante la primera parte pudimos ilusionarnos con una victoria. No había generado muchas chances de gol, pero mostró control del balón y sin arriesgar en demasía alcanzó un gol para pasar al frente y supo controlar al rival. San Lorenzo no encontró el camino que lo acerque a Campestrini en esos cuarenta y cinco minutos, todo indicaba que Arsenal estaba haciendo bien su negocio.

Para la segunda etapa ambos equipos cambiaron el libreto. Arsenal ya no podía salir de su campo y San Lorenzo de la mano de Romagnoli mostraba una vocación ofensiva que tardó apenas tres minutos en alcanzar el empate. Así fue durante casi toda la etapa: San Lorenzo atacando y Arsenal intentando recuperar la pelota para conseguir una jugada de contragolpe.

El conjunto de Sarandí apenas pudo salir de su campo en algunas jugadas aisladas y Campestrini se convirtió en la figura del equipo. La más clara la tuvo Blanco Leschuk que apostó a la jugada individual y no asisitó a Obolo que esperaba sólo para definir al gol. Igualmente el local fue quien más cerca del triunfo estuvo, aunque Arsenal se las arregló hasta en el tiempo adicional para ponerle suspenso con un cabezazo de Lisandro López.

Aunque hubiera venido muy bien la victoria para asegurarse una semana más fuera de la zona de peligro, era un resultado más que injusto. Arsenal bajó mucho su nivel luego del descanso y finalmente el empate toma más valor. Ahora habrá que esperar el resto de los resultados y ahí sabremos si este punto sirve. De todas formas, el partido que viene será decisivo y ganar será vital para poder evitar la Promoción.