Diluvio y tormenta en Sarandí, cancha pesada. No eran buenos los presagios en el Julio Grondona. Siempre que llueve en nuestra cancha nos va mal, y hoy no fue la excepción.

Tras un primer tiempo discreto pero muy parejo, tanto el Viaducto como el Ciclón se repartieron el juego y las imprecisiones, y las llegadas de riesgo frente a los arcos prácticamente brillaron por su ausencia.

El elenco de Alfaro apostaba a las subidas de Yacuzzi por izquierda, al manejo de Gómez y a las ganas de Calderón en ofensiva.
San Lorenzo oponía algunas apariciones de Silvera y el tesón de Bergessio para pelearlas todas. D´Alessandro no aparecía absorbido por el aceptable trabajo de Pellerano y Casteglione.
Apenas un par de llegadas para la visita y un cabezazo de Casteglione tras un tiro libre fueron las mejores jugadas de la etapa inicial.

En el segundo período, la lluvia no dió tregua y se lo notó algo mejor a la visita, más adelantado en el campo y con la iniciativa en ataque, aunque continuaba falto de ideas.

Parecía que el partido se jugaba solo con córners y tiros libres. Lo tuvo Bilos de cabeza, quien con su ingreso mejoró la zona medio del equipo de Boedo, y casi inmediatamente a los treinta y nueve minutos, Bergessio aprovechó una distracción de Arsenal tras un pelota parada y con un fuerte remate venció a Cuenca.

Quedó para el final la desesperada reacción de Arsenal en busca del empate, pero el empuje fue en vano y el Arse otra vez se despidió derrotado y cabizbajo.

Ahora habrá que barajar y dar de nuevo, volver a pensar en la Copa Libertadores, torneo que hoy por hoy no puede permitir otro traspié de Arsenal, si es que el Campeón Sudamericano piensa seguir haciendo historia en el futbol grande de nuestro continente.
Allá vamos Quito!!!

Arsenal vive una mala racha de la que no puede salir. Después de un comienzo de año muy prometedor, ahora no deja de recibir un golpe tras otro.

Las cosas venían bien en el torneo local y en la copa, hasta que llegó el cruce con Fluminense. Esa goleada caló hondo en el plantel y la gente, después ya nada volvió a ser igual

Contra el lobo jujeño fue empate, de la emotividad del partido pareció nacer la levantada anímica suficiente para volver pronto al triunfo; no fue así, al enfrentar a los ecuatorianos por la Copa, el Arse cosechó una nueva derrota que hace peligrar su continuidad en la misma.

Por último, se vino el viaje a Rosario. Una parada difícil pero motivadora, un triunfo lo dejaría en lo más alto de la tabla del Torneo Argentino.

Todo le salió mal a los de Alfaro. Fue un equipo desconocido, mezcla de cansancio, desorden y falta de lucidez. Todo eso hizo que Newell´s manejara a su antojo la primera etapa, donde generó varias situaciones de gol pero sólo convirtió dos.

Las cosas no podían salir peor, el equipo no daba dos pases seguidos, y casi no pudo cruzar la mitad de cancha. Para la segunda mitad Alfaro intentó ir en busca de la remontada con Gómez y Leguizamón en cancha, pero un nuevo gol al minuto del complemento volvió a sacudir las esperanzas del Arse.

Newell´s, con tres goles de diferencia, se dedicó a esperar y le cedió la pelota a Arsenal. "Papu" Gómez hizo adelantar al equipo, pero no lo suficiente como para lastimar al arco rival.

El descuento de Arsenal, a través de un penal ejecutado por Calderón, reavivó apenas el partido. Incluso Arsenal tuvo la chance de convertir el segundo, pero tapó brillantemente el arquero leproso.

El viaducto siguió buscando achicar la diferencia, pero Newell´s volvió a convertir poniéndole cifras definitivas al encuentro. Una nueva goleada en contra, que aumenta las preocupaciones.

Arsenal esta pasando un mal momento, y no puede despegar. Los dos torneos simultáneos pueden ser el principal factor, pero es alarmante la falta de rumbo que muestra el equipo, y la facilidad con que le generan situaciones de gol. Arsenal esta lejos de ser el que fue, todos deseamos que pronto vuelva a encontrar el rumbo.

El partido había comenzado de manera perfecta. El gol de Leguizamón en el primer minuto nos hacía empezar a olvidar la goleada sufrida en Brasil, pero no iba a ser tan simple como parecía.

Arsenal siguió atacando y manejaba el ritmo del partido, pero en el primer descuido que tuvo, Gimnasia lllegó al empate. De todas formas Arsenal siguió generando peligro en el arco de Nereo Fernández, y merecía pasar al frente en el marcador, pero el partido iba a ponerse cuesta arriba.

A los 34 minutos Lunati se apresuró en sacar la primer amarilla a Darío Espínola, quién infantilmente se ganaría la segunda apenas 2 minutos después.

Arsenal improvisaría una línea de cuatro con Garnier, esperando a que llegará el entretiempo. Pero Alfaro tenía que seguir moviendo piezas, ya que a los 40 saldría lesionado Leguizamón. La tarde ya no mostraba el panorama del primer minuto de juego, y lo peor estaba por llegar...

Otra desatención en el fondo de Arsenal, y quedaría Miranda mano a mano con Cuenca, pero Matellán le cometio infracción antes de patear. Penal bien sancionado, pero totalmente exagerada la tarjeta roja que recibiría el central del Arse.

Lunati se volvía protagonista del partido, y la situación del Arse parecia irremontable: dos jugadores menos, y un gol abajo en el marcador.

En la segunda mitad Arsenal saldría decidido a dejar el alma en la cancha, y manejando inteligentemente la pelota supo como disimular las expulsiones que había sufrido.

"Papu" Gómez, tomó las riendas del equipo y tras una buena jugada, remató desde afuera del área, clavando el balón junto al palo. El empate era justo, pero Arsenal sigquiría buscando algo más.

Los jujeños estaban indecisos, y no querían arriesgar demasiado a pesar de la ventaja numérica. Arsenal tuvo chances para pasar al frente, y a Gimnasia le pesaba cada vez mas la responsabilidad de tener dos hombres de más.

Desgraciadamente, Mateo con un derechazo desde lejos le amargaba la noche al Arse. Pero Arsenal no estaba dispuesto a quedarse con las manos vacías.

Los últimos minutos fueron vibrantes. Arsenal defendía apenas con Christian Díaz, y el resto esperaba cerca del área. Los de Ramacciotti comenzaron a tener algunas chances para liquidar el partido, pero no supieron resolverlas.

Cuando ya todo se terminaba, llegaría el penal que sellaría la justicia. El encargado de ejecutarlo fue Mario Cuenca, rememorando aquella noche histórica en el Monumental. Como no podía ser de otra manera, fue adentro.

Arsenal logró la hazaña. Un punto que vale más que eso, luego de la difícil caída frente a Fluminense, el plantel necesitaba levantar el ánimo. Si bien de antemano nadie se conformaba con el empate, con las incidencias del partido fue un gran premio para el esfuerzo de Arsenal. Fue un empate con sabor a triunfo, que sirve como envión para el partido que se viene por la Copa.

Seguramente al comenzar el año, el hincha del Arse se preguntaba si sería posible afrontar exitosamente todas las competiciones que se vendrían en este 2008; los jugadores están demostrando que hay plantel para hacerlo, y los resultados acompañan.

Alfaro le está dando continuidad a todo el plantel, y de esa manera busca tenerlo en ritmo de competición para el momento en que cualquier jugador tenga que ingresar. Subsanando, quizás, una falencia del 2007, la falta de fútbol en los suplentes.

Contra Banfield nuevamente hubo variantes. De esta manera, el técnico ya empleo a más de 20 de sus jugadores, logrando así que todos se mantengan a punto.

A pesar de que la noche no iba a empezar bien, con el gol de Laso a los 16 del primer tiempo, el viaducto lo iba a dar vuelta. Matellán (de cabeza) y Biagini, iban a poner justicia en el marcador antes de ir al descanso.

En el segundo tiempo, Arsenal iba a liquidarlo con una contra muy bien jugada, y definida con éxito por Carrera.

El equipo se mostró ordenado, y supo golpear en los momentos justos. Podría haber ampliado la ventaja, pero los dos goles de diferencia le dieron la tranquilidad suficiente como para manejar el ritmo del partido hasta el final; aún jugando con un hombre menos los últimos minutos por lesión de Andrizzi, con los cambios agotados.

Se destacaron Carrera y Pellerano (su mejor partido en el Arse), y el debutante juvenil Juan Bottaro, quién participó de la asistencia en el tercer tanto.

El celeste y rojo sigue de racha, de local había quedado claro, y ahora lo confirmó fuera de casa. De los 7 partidos del 2008, ganó 5 y perdió sólo 2. Por ahora las dos competiciones se vienen afrontando sin inconvenientes, y los de Alfaro irán por el batacazo en el mismisimo Maracaná.